¿Compañerismo en el sufrimiento?
No conozco a nadie que esté buscando sufrir. Pero en Filipenses dice, “a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte” (Filipenses 3:10, RVR). Si miramos de cerca, todos queremos el poder que viene con la resurección de Jesús, el cual consiste en vencer a la muerte con eternidad. Pero, ¿nos emocionamos por atravesar sufrimiento?
Cuando hacemos a Jesús, Señor de nuestras vidas, instantáneamente empezamos a luchar contra el mal. Esto es parte de nuestro sufrimiento en esta vida. La buena noticia es que nuestro espíritu tiene victoria sobre las peleas en nuestra mente, porque nos encontramos en una batalla espiritual, no física. Debemos estar listos para dar nuestras vidas por el propósito de Jesús, justo como Él dio su vida por la nuestra.
“Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios” Filipenses 3:15. (RVR)