«Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos
ayude en el momento que más la necesitemos.» Hebreos 4:16
Se nos ordena acercarnos valientemente ante Dios cuando tengamos una necesidad. La palabra hebrea
«confiadamente», meta, significa «con». Debemos venir sin dudarlo, sin miedo, con reverencia, con el corazón
abierto o con lágrimas. Dios no le pone una condición a la necesidad; puede ser cualquier necesidad. Dice
con amor: «Ven…en momentos de necesidad.»
Podemos venir por lo que Jesucristo hizo en la cruz. Él era el sumo sacerdote, el sacrificio de una vez por
todas. Tenemos un Dios que tiene brazos abiertos y nos quiere en su presencia. Él nos escucha y actúa
según nuestras peticiones. Ven para que puedas «recibir misericordia y hallar gracia.”