¿Cómo manejamos las dudas que se apoderan de nosotros?
“Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: !!Señor, sálvame!” Mateo 14:30
Él dejó que el miedo, la ansiedad y el estrés se apoderaran de él y abrieron la puerta a la duda.
La duda es una fe vacilante (Judas 1:22). Debemos incrementar nuestra fe para vencer a la duda, “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.” Romanos 10:17
“Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.” Marcos 11:23