Definición de todo

Oré por sanamiento físico y espiritual por muchas personas, la respuesta más común que siempre recibo cuando se trata de sanamiento físico es, “si es la voluntad de Dios.” Pero ese comentario nunca surge cuando hago la oración por sanamiento espiritual. Y frecuentemente la idea es, “Yo sé que Dios sana físicamente, pero ¿Él me sanará?”

Cuando Jesús fue a la cruz, Él derramó su sangre por muchos lugares; su cabeza cuando le pusieron la corona de espinas, su espalda cuando lo azotaron hasta que su carne estaba expuesta, su barba cuando la arrancaron de su cara (Isaías 50:6), sus manos y sus pies cuando le pusieron los clavos y su costado cuando le clavaron la lanza.

Él ha terminado el trabajo para nuestra salvación y sanamiento, pero nosotros debemos aceptarlo por fe.

“…y por su llaga fuimos nosotros curados.” Isaías 53:5b RVR

“…y le siguió mucha gente, y sanaba a todos.” Mateo 12:15b RVR

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” Juan 3:16 RVR