¿Todavía no recibiste tu sanación? Muchas veces varias personas no reciben su sanación porque existe cierta inmoralidad en sus vidas.
Dios quiere que vayamos a la raíz y la matemos. Sacar todo lo malo de nuestras vidas, no solamente cortarlo, sino desarraigarlo. Nunca más volver a lo mismo.
Necesitamos encontrar la raíz, arrepentirnos y alejarnos de ella.
“Ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.” Romanos 6:13