El dolor vendrá
Vendrá el dolor. La forma en que respondes al dolor es fundamental. Un corazón inclinado hacia Dios lo invitará a la situación para resolverla. Guarda tu corazón con toda diligencia, porque de él brotan los manantiales de vida (Proverbios 4:23).
¿Puedes decir: “Porque considero que los sufrimientos de este tiempo presente no son dignos de ser comparados con la gloria que será revelada en nosotros”? Romanos 8:18