Las millas apilados. Mi carrera se convirtió en el foco de mi vida. Todo se centra en torno a un plan, un plan para correr un maratón. Comenzó con un objetivo simple y se convirtió en una compulsión implacable. Los más millas me encontré, más millas que necesitaba para correr. Me estaba matando todo en mi vida. Mis deseos me llevó.

“Todo lo contrario, cada uno es tentado cuando sus propios malos deseos lo arrastran y seducen. 15 Luego, cuando el deseo ha concebido, engendra el pecado; y el pecado, una vez que ha sido consumado, da a luz la muerte.” Santiago 1:14-15

No fue hasta que se lesionó hice veo cuán lejos de su curso mi carrera me había llevado.

Dios siempre provee un mejor plan para nosotros volver a la pista.

«Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman.» Santiago 1:12