Si estás luchando por perdonar a alguien que te ha lastimado, pídele ayuda al Señor. La falta de perdón
puede lastimarte más que a la otra persona. Abre la puerta para que el enemigo entre y te atormente; la falta de perdón invita a la amargura.
Recuerda, el perdón no significa que lo que se hizo fue correcto. Sin embargo, lo hace correcto a los ojos de Cristo.
“Asegúrense de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz amarga brote y cause
dificultades y corrompa a muchos;” Hebreos 12:15
«Pero, si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les perdonará a ustedes las suyas.» Mateo 6:15