Los comentarios son off para este post

Negando la impiedad

Para negar, alejarnos y no seguir las cosas que no son de Dios, debemos tomar una decisión y apegarnos a ella. Esta decisión no es una vez por todas que se hace en la salvación. Pero es una elección que debes hacer todos los días. Seguiré a Jesús hoy, y haré lo que Él desee. No mi voluntad sino la tuya, Señor. Note que dije, Señor.

Cuando aceptas a Jesús, Él es tu salvador. Cuando decides seguir a Jesús, Él es tu Señor. Él es el gobernante de tu vida.

“Porque la gracia de Dios que trae salvación se ha manifestado a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, que se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.” Tito 2:11-14

Los comentarios están cerrados.