Rechazando a Dios
Dios nos da una muestra de como deberíamos vivir nuestras vidas a través de Jesucristo.
“Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación. Así que, el que desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo.” 1 Tesalonicenses 4:7-8. (RVR)
La santidad es importante para Dios.